Relato en Prosa: El color de la vida

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by ©️elrincondekeren

Descendiendo por la cuesta, se iluminaba con timidez la explanada que de pronto se sucedía al paso de los pies. El corazón, bateando con cierta persistencia y furia. Se debatía entre el paisaje y la niebla que sobrecogía las mañanas de aquel lugar. Tardó bastante rato en asimilar, que todo aquello: árboles, tierra, vegetación, edificios a lo lejos y la estampa que se anunciaba sobre la mañana tempranera que algo, iba a cambiar.

El cielo, aunque invadido por la neblina que acontecía, simulaba la azotea de los días anteriores, ¿Cuántas veces se había dado de bruces con las preguntas que nunca sabía responder? Mas de la cuenta. ¿Cuántas veces la habían mirado y había sentido que la vida tomaba un rumbo que no la hacia sentir del todo bien? podía perder la cuenta. Pero aquella mañana, el paseo era la visión de un día que para algunos, era feo. ¿Quizás cómo ella? algunos podrían llamarlo que era un día negro, ¿Pero era el negro un color feo? quizás no era el color, sino el significado que había tomado la palabra a lo largo de los años. Y seguía pensando en el aquel caminar reflexivo en el que música y silencio se iban combinando.

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Al siguiente día, la vegetación era visible, pero lo cierto era que el invierno había dejado sus rayos de sol, su calor más tardío. Y los alegres corazones, más tranquilos. Porque pobres de nosotros que el invierno haga su aparición. En el cielo azul que nunca había visto desde hacía tantos años, se escondían los correteos, los paseos en moto, las vistas de los aviones teledirigidos sobre la llanura más allá, escondida. Los cerros, que lejos en su llamado, invitaban a visionarlos, el secretísmo de un día de ejercicio; y con el, el pensamiento de una estancia al aire libre, de un sosiego que iba tomando forma. Accionó el botón y la máquina encuadró la imagen. El silencio se instauró en aquel descanso de una vuelta con el alma a flor de piel por los recuerdos y a su cabeza, las consecuentes preguntas ¿Lo conseguiré?

A lo largo de su vida, la habían tachado de muchas cosas, tantas que, cómo bien se repetía una y otra vez, tenía que seguir. Cada color en su piel, era una mirada extraña; y una sonrisa del contrario, era casi una bendición. De acuerdo con todo lo vivido, lo lógico sería aceptar que nadie iba a tratarla cómo ella quería, o al menos no, quien no la conociera. ¿Para que enredarse? El camino la había dejado extasiada. Y en aquel dulce resplandor entre inhalar y exhalar, se ofreció cómo premio una botella de agua fría: Habría que hacer algo con eso del tabaco. Pero por ahora, lograba apartar todo pensamiento y del dichoso paquete. A ver qué tal se da la próxima vez. ¿Qué diantres pasa cuando uno camina?

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Las mañanas, románticas cómo ellas solas, sacudían su corazón; su cabeza quedaba liberada del mal, y su pensamiento, una vez más, con la redundancia encima, comenzaban a proporcionarle ese fervor que tanto añoraba. Y si no fuera por el frío, diría que aquello, era estar en la gloria. Una glorificación que reanudaba cada mañana a fin de sentirse conectada con el verde. ¿Qué tenía ese color que tanto le gustaba? conectada a la naturaleza, pero solo para salir del ajetreo, no estaba nada mal. Anidaba la posibilidad de un nuevo comienzo: Dejar atrás el pasado y empezar de cero; sola, sin nadie que le esperara en casa, sin nadie que le ocupara el colchón, sin nadie que le recordara que ... Sin nadie. ¿Y saben qué? el color de la vida, comenzaba a ser de un color romántico. ¿Qué de qué color es el color romántico? ¿De qué color es el sosiego? y ¿De qué color es la vida?

Comenzaba a pensar que de caminares, de pensares reflexivos que le acudían con fuerza aunque la timidez sacudiera su alma, aunque el miedo, le echara para atrás, aunque las miradas no fueran las que ella quería, aunque la gente, no comprendiera jamás qué era para ella ese momento reflexivo. El color...

Quizás, no se trataba de un simple color...

Miguel Pina22 de enero de 2020, 15:23
Hola, Keren. Conectarse con la Naturaleza me parece una perfecta forma de reflexionar y ver en cierta manera como ha sido nuestra vida y qué esperamos de ella.

¿Qué de qué color es el color romántico?

Rojo

¿De qué color es el sosiego?

Color miel

y ¿De qué color es la vida?

Gris, blanca, negra, azul, verde o sencillamente un arco iris de ilusiones y desilusiones.

Un abrazo.
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