¡Hola, mis lectores; lectores habituales y nuevos lectores!
Cómo ya dije en estos días,
Hoy se inicia una serie de relatos relacionados con las fotografías de Melina Boloba y
que tendrán escenarios diferentes pero que todos cumpliran la misma relación:
Afrodescendencia y Africanidad.
Se nos ocurrió mezclar la fotografía con la literatura ya que era algo que habíamos hablado durante algún tiempo.
¡ Pues el día llegó!
He decidido alargarlo a una semana en la que hablaremos de distintas vidas.
Para los más nuevos:
Melina Bolopa es una fotógrafa con más de 10 años de experiencia en el que conoceréis más de cerca su proyecto <<Alma negra>> y con el que veremos a modelos poderosas que me han servido de inspiración para crear esta sucesión de relatos que se alargara durante toda la semana.
Sin más dilación os presento el primer relato:
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| Artista: Melina Bolopa Maquillaje: Estefania Andrades Modelo: Helene |
Ya había cumplido los diez y seis años. Aquel día se había levantado temprano a las cinco de la mañana para preparar los rompe-muelas y venderlos en el mercado para sacarse un dinero extra y así comprarse su uniforme de la escuela mientras sus padres no podían. Luego de prepararlos, se iba con la bandeja cubierta con un mantel , los exponía en una mesa plegable en la que los dulces acabarían siendo devorados por los más curiosos de la zona; preferentemente, niños y adolescentes ,que pasaban por allí y si aquello no daba mucho resultado, siempre podía vender cigarrillos sueltos en la salida del cine allí donde más gente había, donde las aglomeraciones se hacían presentes.
Después de la venta, se iría a recoger agua a 20 kilómetros; en un pozo cercano, se asearía , se arreglaría luego después de limpiar la casa y dejar la comida preparada para los más pequeños y ella misma. Y por fin , iría a clase a cultivarse.
Muchos de los días los pasaba fantaseando en cómo sería estar en España, pues había oído de boca de su mejor amiga que se iba a la península a estudiar para tener un buen futuro, y no era para menos; en la tele no paraban de anunciar lugares bonitos, bellos, sin la vida dura de la África que se llevaban a sus compañeros de pupitre por una polio o por algo tan simple como una gripe mal curada. Allí aparecían todos con trajes, se les mostraba con la aparente oportunidad que se desprendía de por todos lados, de aspecto lozano pero ella seguía pensando que parecían gente demasiado feliz, o al menos eso decían en televisión "Viaje a España. Descanse en sus vacaciones" "España, la tierra que no debe perderse" A algunos solo les faltaba decir que era la tierra prometida, el sueño español y coger el primer vuelo sin lugar previsto, pero con destino hacia tan solo mirando el estrecho.
Su amiga Kiro, ya hacia tres meses que se había ido. Los días parecían pesarosos, pero ahora tendría más tiempo para dedicarse a los estudios y cargar con más responsabilidades familiares, cómo cocinar, bañar a los hermanos pequeños los cuales todas las hermanas pequeñas se peleaban por cuidarlas, si algo había en aquella familia y en la mayoría de los yugos familiares era amor por la familia, y el hecho de que las hermanas mayores se pelearan por bañarlas con apenas diez años para bañar a los más pequeños, no era más que la ternura y la creciente idea de parecer más mayores. Amor, respeto y familiaridad.
Para Tiwa, perder a su amiga significaba haberle arrancado una parte de ella pero también sabía que tendría mejor oportunidad, aunque por dentro se muriera de rabia. A Tiwa, sin embargo, no le quedaría mucho tiempo para pensar pues la vida en África era dura, o por lo menos entretenida, pronto llegarían las fiestas y podría echarse bajo las palmeras y beber agua de coco. Relajarse cerca del mar. Estar con sus demás amigos y compañeros de escuela, vecinos y vecinas del lugar , primas y primos. Podrá ir a las fiestas que van los mayores.
Por otro lado Kiro, llegó a España a través del estrecho, mientras pasaba por la aduana no pudo evitar engrandecer ojos cómo platos al comprobar que todos, en su mayoría, eran blancos. Se le hacía raro. Pero varias veces comprobaron su maleta, inconsciente de lo que significaba, pensó que eran cosas de los aeropuertos. Tras varios controles, por fin pudo salir de aeropuerto a las once de la noche; y eso que había llegado a las seis de la tarde.
Cuando caminaba por las calles de la bella Barcelona negra, donde la noche se fundía con la brillantina de los edificios, no pudo más que quedarse boquiabierta. Cogió un taxi y el taxista la ayudó a meter el equipaje en el maletero nuevo:
- ¿A donde te llevo ?- Pero Kiro estaba anonadada con el paisaje y este insistió - Yo hablar español, ¿dónde querer ir tú?
-No se preocupe en mi tierra también hablamos español. Por descontado. - El taxista enrojeció ante un castellano algo marcado pero al fin y al cabo, castellano.
Le dio la dirección de su tía, y la noche les engulló dejando atrás el aeropuerto, los edificios, los túneles, los parques, la torre Agbar, Arco de triunfo o hasta Plaza Cataluña. Cualquiera habría jurado que aquello era una tour por la ciudad, pero Kiro, inconsciente o tal vez inocente, admiraba más que se enfadaba. y el parquimetro subía.
Al día siguiente era fin de semana. Así que tuvieron tiempo de ver la ciudad y darse cuenta de lo diferente que era todo. ¿O era ella la diferente? :
- ¿Porque todos me miran tia?
- Pues, aunque te parezca algo raro... aquí la rara eres tu, y no ellos. Estás en un país de blancos. ¿Porqué va a ser?
Un hombre las insultó y las mando a su país Kiro se quedó de piedra y su tía lejos de montar una escena y verse en un corrillo de gente que defiende y otra que agrede, decidió no decir nada para que la llegada de Kiro fuera lo mas amena posible, pero se lo estaban poniendo difícil.
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| Aritsta: Melina bolopa Maquillaje: Labios Coloraos Modelo: Escairy |
Kiro vestía traje tradicional, en unos años ochenta, lapá, pañuelo y una figura esbelta con una melena que la hacían aun mas bella con los colores estridentes que la acompañaban allá a donde iba. Pero su tia que sabía que aquello con diez y seis años le causaría problemas, le compró ropa más europea. Lo que quiera decir eso.
Kiro no entendía el por qué. Simplemente asintió, dio las gracias y el lunes asistió al instituto. No imaginaría los trasiego de ese curso que se alargarían entre los abucheos de sus compañeros gritando "Vuelve de donde has venido, mono" al cambio de Kiro e insistencia en querer parecer una más. Hasta llegar a casa una noche, con la aceptación de un grupo blanco que quería ser su amiga. Pero ella, su tía lo dijo claro,
"No olvides de donde vienes. Esa gente no te conoce. No pierdas tu esencia por gente que no valora nuestra cultura ni se digna a querer saber nada de nosotras. Somos más que una piel bonita y tersa, somos diosas culturales y ancestrales. Viniste a estudiar. No pierdas el camino".
Tres años después Tiwa se pregunta porque no explica en sus cartas a Kiro su vida en España, porque no la ha llamado y porque nunca manda dinero a sus padres.
Lo que no sabe es que Kiro se ha quedado embarazada, y teme un "Te lo avisé" de sus padres.
Hasta aquí llega la colaboración entre Melina y yo esperando que esta primera toma haya sido de agradado. La idea de no poner los mismos nombres que los de las modelos es que en Guinea, cómo descendiente de padres de ella que fue colona española, cómo muchos sabéis, al final, los guineanos y muchos otros africanos. tienen nombre español y del origen.
Nos vemos el miércoles en el blog para otra seguir con todos los trabajos de la fotógrafa Melina Bolopa. La colaboración se extenderá a lo largo de la semana, Lunes , martes y miércoles.
GRACIAS POR LEER
GRACIAS POR DEDICARME TU TIEMPO.
©️El Rincón de Keren
Muy buen relato,muchas personas se sentirán identificadas con Tiwa y kiro. Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias de parte de Melina y mía. Un gran saludo y gracias por dedicar un moemento a mi espacio.
EliminarAkeva!!
Enhorabuena a ambas por una colaboración tan especial. Bellas fotografías y ejemplificador texto. Me parece una excelente idea que a través de un relato nos podamos poner en le piel del otro. Como he comentado en alguna ocasión, la base de la empatía debe ser fundamental en la enseñanza escolar. También en las casas, claro.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo y que la semana sea muy productiva con tan magnífica colaboración.
Gracias Miguel por apreciar el arte en todas sus facetas hoy mostradas. La idea que haya más empatía en las aulas, me parece muy bueno, ya se fomenta en Madrid si no me estoy equivocando y en las universidades que no es lo ideal pero son los estudiantes los que lo piden: Charlas, conferencias etc
EliminarMe alegra que hayas visto una parte de lo que ha comenzado y se irá viendo a lo largo de esta semana.
Feliz inicio de semana.
Muy buen relato! Me encanta la colaboración. Espero leer los siguientes.
ResponderEliminarCelebro que te haya gustado. Te esperamos en el siguiente RelAfro. Gracias por pasarte.
EliminarFeliz inicio de semana.
Interesante relato. Describe situaciones que desafortunadamente muchas jóvenes siguen viviendo aun hoy en día, a pesar de la “globalización” y de la educación sexual a la cual se tiene acceso.
ResponderEliminarHola Rosa,
EliminarAunque vivimos en un mundo intercomunicado y que avanza crecientemente, se ha dicho en muchas charlas que África debería despertar dicho de una manera simple en lo que a sociedad, pero que no puede debido a las presiones de otros países que han mercantilizado el continente así cómo colonizado.
Aunque se tiene consciencia de la vida sexual y se tienen charlas, sobre lo que conlleva, muchas mujeres no tienen otra que tener los hijos. Sin más remedio que el rechazo de una niña joven, en estado. Pero nuestra protagonista de queda embarazada en España y no es África. Hago alusión a los muchos hombres que tienen relaciones con mujeres negras y luego cuando se quedan embarazadas, se desentienden de ellas y la criatura.
Gracias por pasarte por el blog. Un saludo y feliz semana.
Bellísimas fotografías!!! y los relatos que le dan una historia, me ha encantado saludos!!!
ResponderEliminarGracias Eli de parte de Melina y mía. Gracias por dedicar parte de tu tiempo. Un saludo! y.. ¡no te pierdas el del miércoles!
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