Si vas a adelgazar, mi consejo, es que acudas a un nutricionista pero primero contactes con tu médico de cabecera y que decida si realmente puedes o necesitas hacer cuidado de tu cuerpo. Y  digo cuidado y no dieta porque hay que aprender a comer bien, no hacer dieta; aprender qué nos viene bien a cada una de nosotras, y no fijarse en modas ni recetas milagro; recordar que el cuerpo es con el que vamos a vivir toda la vida y adelgazar tendría que ser, cómo primera prioridad, por salud. (Lo demás es secundario. Importante pero no necesario)

Para esta entrada, rescato entradas de mi blog personal, HISTORIAS CON "K" y comenzamos con ese post que dio paso a la decisión de cuidarme. 

QUERIDÍSIMO CUERPO- HISTORIAS CON "K" (Clica en el título)

Comenzaba intentando reconciliarme con mi cuerpo, y esto, siendo algo tan habitual en los consejos con los terapeutas lo he ido practicando de diferentes formas:

-Hablarme bien 

-Comer bien no significa privarse de caprichos, lo hay que tener pero no a atracones

-Cambiar el foco de las cosas que me gustan, como dedicar más tiempo a salir a la calle y no únicamente a escribir. 

-Leer géneros que no suelo leer

-Leer en la calle 

-Dedicar momentos a no hacer absolutamente nada, pues vivimos en una sociedad tan exigente de actividades en la que lo "rentable" es hacer muchas cosas a la vez, que nos olvidamos sentirnos en esos silencios y por eso a veces hay tanto ruido. 

-Escuchar otros géneros de música. 

-Escribir en la calle aunque no esté inspirada

-Llevar un decálogo de los días valorándolos en buenos y malos. (Diario)

-Ampliar círculos de amistades tanto por vía internet cómo en la vida real. (Esto último me cuesta un poco más por aquello del COVID)

-Intentar buscar soluciones a problemas y comer solo cuando tengo hambre. Porque hay días que el cuerpo, no siente hambre. 

Hay muchas más cosas que han formado este proceso en que comencé en las andaluzas. Pero... ¿a que no sabéis porqué comencé hacer dieta?

Por aquella época tenía pareja y queríamos concebir pero me aconsejaron que, debía adelgazar al menos 5 kilos, por si había problemas, finalmente, decidí que no quería tener hijos debido a las pruebas que tenía someterme ya que mi expareja era estéril y yo nunca había querido tener hijos. Comencé a adelgazar por esa idea de los médicos pero al ver que iba teniendo resultados y por la presión de que cuando vas a comprarte ropa no te entra nada, seguí aunque no quisiera tener hijos. Había gente que me preguntaba cómo había conseguido adelgazar tanto, y solamente había adelgazado 5 kilos y volvemos a ese temible tema. 

Hay muchas chicas jóvenes que me siguen, y no me siento en el con el deber de informar que si adelgazas por otro tema que no sea salud, al menos, hazlo de la mejor las formas y sin machacarte. Es un proceso lento y que requiere paciencia y disfrute. De esa manera, es mejor que perdure y se adquiera esos buenos hábitos y si al final decides que no quieres ESTAR DELGADA O CUIDARTE, ¿Sabes una cosa? Es igual de válido porque lo más importante no es una talla, sino quererte a ti misma tal y cómo eres. Y esa es la mayor calma que puedes encontrarte. 

POR ÚLTIMO RECORDAR QUE UNA MALA PRÁCTICA DE UNA DIETA EXPRESS PUEDE CONLLEVAR, LOS TEMIBLES,