🍂¡BIENVENIDOS Y BIENVENIDAS!🍂
[ 1ª Parte ]
...Bienvenido a este especial literario en el que pasar mucho miedo...
Si tienes una historia, leyenda, cuento o microcuento que conozcas de tu ciudad, país, o comunidad, anímate a dejar tu historia, o esa que te contaron y te dio mucho 'cringe'. Pero debe ser de tu país, ciudad o comunidad, y...
¿Dónde puedes enviarlas?
Al correo ✉ kturmob@gmail.com
La idea es que nos congreguemos todos y sepamos un poco más sobre ese país o comunidad.
¿CUÁL ES LA HISTORIA DE TU PAÍS O COMUNIDAD?
Hoy tenemos a un escritor Valenciano.
Su nombre es Francesc Palanca y es autor de varias novelas.
Pero... ¿Qué sabemos de Valencia?
La Comunidad Valenciana (oficialmente en valenciano): Comunitat Valenciana) es una Comunidad autónoma española situada en el este de la península ibérica. Se constituyó formalmente en el año 1982 al aprobarse su Estatuto de Autonomía y, desde el año 2006, se considera nacionalidad historica al amparo de lo dispuesto en el artículo segundo de la Constitución.
El actual territorio valenciano coincide en su mayor parte con el del histórico Reino de Valencia que pervivió desde el siglo XIII al XVIII. Desde entonces ha recibido diversas denominaciones: a finales del siglo XIX se conocía como Región Valenciana, a partir de la década de 1960 también se emplea de manera no oficial la forma de País Valenciano y a partir del Estatuto de Autonomía, el término de «Comunidad Valenciana» se extiende y se populariza. También se usa Valencia, aunque este último puede llevar a confusión con la ciudad y con provincias homónimas.
Valencia, es conocida por sus playas pero también por sus leyendas y mitos, muchas de ellas parecen más fantásticas que mitos urbanos.
Es el caso del Santo Grial
El caimán del Patriarca
La virgen del buen parto
La leyenda del Rat penat (La leyenda del murciélago)
y muchas otras...
Hoy nos deja su relato inédito y para El Rincón de Keren, EN EXCLUSIVA,
Francesc Palanca
👻Y TAMBIÉN DIENTECITOS👻
Ésta historia, que bien pudo ser real, sucedió en el pueblo de Penàguila.
¿Qué dónde está eso? Pues mira, hay que situarse en la provincia de Alicante, y
buscar por ahí, por el interior, en un lugar donde pone “Comarca de la Foia
d’Alcoi”. Un lugar muy bonito, por cierto, entre grandes y sombrías montañas.
Mira, ¿ves ese camino? Lleva por una senda rodeada de frondosos olmos. Si lo
sigues, llegas a una fuente grandiosa, donde el agua ruge a través de sus
veinticuatro caños. Antiguamente las mujeres (sí, siempre les tocaba a las
mismas), acudían a realizar la colada; y por qué no decirlo, a socializar.
Quizá si tienes suerte, aún puedas ver un grupo de mujeres «chap, chap, chap…» lavando la ropa, y
departiendo unas con otras. Eso sí, de día. De noche no se acerca nadie a esa
fuente, porque dicen que sobre ella, pesa una maldición.
―¡No vayáis a la fuente a
lavar de noche! ―Decían las madres a sus hijas, cuando ya tenían edad de aprender esas cosas.
Y la verdad, es que el clima acompañaba; las noches suelen ser frías, y
el viento corre por esa senda como si estuvieran cantando mientras recorre el
camino de olmos de arriba abajo. Aunque claro, siempre hay un valiente que se
atreve a desafiar la maldición. La última que se conoce fue Antoñita la
Alcoiana. La muchacha no había nacido en el pueblo, sino que se había mudado
cuando era pequeña con sus padres desde la capital de la comarca; por eso no
creía demasiado en duendes, fantasmas y maldiciones. Sus amigas del pueblo la
miraban incrédula, cuando ésta les decía que, probablemente, se dejaban
sugestionar por el sonido del viento entre los árboles, o la niebla que a veces
hacía acto de presencia por allá. Una de ellas era Júlia, la hija del entonces
alcalde de Penàguila. Hasta la llegada de Antoñita, era considerada como la más
valiente de su clase, y aquellas bravatas de la Alcoiana no le agradaban en
exceso; por ello un día, harta de que la chica se enorgulleciera de no creer en
cuentos de viejas, le dijo:
―Si tan valiente eres, ves ésta noche a la fuente, a hacer la colada. Y si a la mañana siguiente vemos
colgada del tendedero una pieza de ropa, diremos que eres la más valiente.
Naturalmente, Antoñita aceptó el reto. Dijo a su madre que por la noche
iría a dormir a casa de su amiga, Raquel, y metió una sábana en un cestito antes
de marcharse. Se despidió, y siguió el camino que llevaba hacia la fuente de
veinticuatro caños. Apenas hubo recorrido un par de metros por la avenida de
los olmos, le pareció que alguien lloraba. Inmediatamente, se detuvo a escuchar
más atentamente. Afinó el oído, hasta volver a escuchar un llanto medio
silencioso. Abandonó la senda para seguir aquel sonido; en un claro, algo más
adelante, iluminado por una farola, un niño, casi un adolescente, lloraba con
la cabeza enterrada entre las rodillas. Había nevado unos días antes, y el
ambiente era frío, sin embargo, apenas cubría su torso una chaqueta.
―Pobrecito. ¿Te has
perdido? Debes tener mucho frío.
El niño dejó de llorar y la miró. No dijo palabra alguna. Ella le alargó
la mano, y el niño la agarró.
―Vente conmigo; en cuanto
realice una tarea, te llevaré a casa. Allá podrás calentarte y comer alguna
cosa.
Antoñita echó a caminar de nuevo por la senda, con el niño de la mano. Ya
fantaseaba incluso con haber hecho un nuevo amigo. Entre tanto pensamiento,
llegaron a la fuente. Antoñita sacó de la cesta la sábana, y empezó a darle «chap… chap… chap…» hasta que quedó… un poco
decente. Odiaba reconocerlo, pero hacía un frío casi sobrenatural, y el viento
silbando entre la neblina no ayudaba a relajarse. Guardó otra vez la sábana en
la cesta, y se dirigió hacia el niño, que todavía tenía la mirada triste.
―Vamos, amiguito. Volvemos
a casa, allá podrás comer y dormir caliente.
El niño levantó la cabeza y sonrió a la muchacha; tenía los dientes más
blancos y bonitos que había visto nunca.
―¡Que dientes más bonitos
tienes!―Dijo
Antoñita
―Eso no es nada―Respondió el niño ―¡Mira mis colmillos!
Y, tras decir eso, se abalanzó sobre el cuello de la pobre Antoñita.
De aquella joven no se supo nunca más, sus padres estuvieron toda la vida
buscándola en vano, aunque en el pueblo hay quién dice que sigue en cierta
manera por allá cerca. En fin, queridos lectores. Que si vais a Penàguila, no
dejéis de admirar la senda de los olmos y su fuente de veinticuatro caños, eso
sí, de día. Porque de noche, os podríais encontrar con una vieja escuálida y de
piel muy blanca, que lava y lava sin parar, furiosamente. Y si no me hacéis
caso, y finalmente es así, no le contéis nunca la historia que os he contado
yo. Porque, de lo contrario, os mirará fijamente y os dirá
―¿¿¿ERAN COLMILLOS COMO
ESTOS???
FIN.
Este relato corto es una versión un poco libre de una famosa «rondalla» popular en el pueblo de
Penàguila, que sí que existe en realidad. La primera vez la leí en la versión y
recopilación de Enric Valor; tal vez no sucedió en la noche de todos los
santos, pero bien podría ser posible, porque en esas fechas puede pasar
cualquier cosa.
-FranXapa
***
Para mear, y no echar gota, ¿verdad? yo, la verdad, no me acercaría demasiado por los Olmos de Penàguila, Alicante.
¿Qué os ha parecido el relato de ésta primera parada?
Pues, conozcamos mejor las obras de el Escritor, conocido en sus redes como Fran Xapa, debido a un error administrativo a la hora de crear su dirección de e-mail.
PROYECTO AVIAR
En la actualidad, está casi acabada la saga de 'Proyecto Aviar', la cual, la primera entrega, podéis leerla AQUÍ, ya que realicé una reseña y tengo que decir, que está muy bien conseguida. El #booktrailer, lo hice yo, además de la reseña, valga la redundancia.
Si quieres adquirir ésta saga, te la dejo POR AQUÍ
PSICOFONÍAS
Psicofonías, "Empecé a escribir de muy joven, cuando pensé que debía ser muy fácil emular a los autores que idolatraba (Gianni Rodari, Richmal Crompton, Michael Ende?) Craso error, escribir no es nada fácil. Sin embargo, a base de leer y formarme, conseguí ganar mi primer accésit cuando estudiaba secundaria, y el segundo en la universidad. Después de eso me lancé a por mi primera novela, que publiqué el año pasado. Psicofonías es mi primera aventura dentro del mundo de la novela de fantasía, un género que siempre me ha atraído, como lector y como autor; aunque eso sí, aderezada con toques de comedia."Si quieres adquirir ésta obra te la dejo EN ESTE ENLACE DE AQUÍ
Bueno queridos lectores, espero que hayáis pasado mucho miedo, porque no es el único relato que veréis por aquí en esta semana.
Si tu también quieres que publique tu relato, cuento o historia de tu país, ciudad o comunidad.
📭📩Escríbeme a mi correo kturmob@gmail.com con el asunto: ESPECIAL DE HALLOWEEN
Espero veros a ti y a tus amigos por aquí. Gracias por elegir el rincón de Keren, tu lugar de lecturas.
P.D. Al final de ésta semana que durará el especial, os realizaré una adivinanza.
Mientras tanto... 💀💀💀💀¡Pasad mucho miedo!💀💀💀💀💀
©El Rincón de Keren
Ésta historia, que bien pudo ser real, sucedió en el pueblo de Penàguila. ¿Qué dónde está eso? Pues mira, hay que situarse en la provincia de Alicante, y buscar por ahí, por el interior, en un lugar donde pone “Comarca de la Foia d’Alcoi”. Un lugar muy bonito, por cierto, entre grandes y sombrías montañas. Mira, ¿ves ese camino? Lleva por una senda rodeada de frondosos olmos. Si lo sigues, llegas a una fuente grandiosa, donde el agua ruge a través de sus veinticuatro caños. Antiguamente las mujeres (sí, siempre les tocaba a las mismas), acudían a realizar la colada; y por qué no decirlo, a socializar. Quizá si tienes suerte, aún puedas ver un grupo de mujeres «chap, chap, chap…» lavando la ropa, y departiendo unas con otras. Eso sí, de día. De noche no se acerca nadie a esa fuente, porque dicen que sobre ella, pesa una maldición.
Y la verdad, es que el clima acompañaba; las noches suelen ser frías, y
el viento corre por esa senda como si estuvieran cantando mientras recorre el
camino de olmos de arriba abajo. Aunque claro, siempre hay un valiente que se
atreve a desafiar la maldición. La última que se conoce fue Antoñita la
Alcoiana. La muchacha no había nacido en el pueblo, sino que se había mudado
cuando era pequeña con sus padres desde la capital de la comarca; por eso no
creía demasiado en duendes, fantasmas y maldiciones. Sus amigas del pueblo la
miraban incrédula, cuando ésta les decía que, probablemente, se dejaban
sugestionar por el sonido del viento entre los árboles, o la niebla que a veces
hacía acto de presencia por allá. Una de ellas era Júlia, la hija del entonces
alcalde de Penàguila. Hasta la llegada de Antoñita, era considerada como la más
valiente de su clase, y aquellas bravatas de la Alcoiana no le agradaban en
exceso; por ello un día, harta de que la chica se enorgulleciera de no creer en
cuentos de viejas, le dijo:
―Si tan valiente eres, ves ésta noche a la fuente, a hacer la colada. Y si a la mañana siguiente vemos
colgada del tendedero una pieza de ropa, diremos que eres la más valiente.
Naturalmente, Antoñita aceptó el reto. Dijo a su madre que por la noche
iría a dormir a casa de su amiga, Raquel, y metió una sábana en un cestito antes
de marcharse. Se despidió, y siguió el camino que llevaba hacia la fuente de
veinticuatro caños. Apenas hubo recorrido un par de metros por la avenida de
los olmos, le pareció que alguien lloraba. Inmediatamente, se detuvo a escuchar
más atentamente. Afinó el oído, hasta volver a escuchar un llanto medio
silencioso. Abandonó la senda para seguir aquel sonido; en un claro, algo más
adelante, iluminado por una farola, un niño, casi un adolescente, lloraba con
la cabeza enterrada entre las rodillas. Había nevado unos días antes, y el
ambiente era frío, sin embargo, apenas cubría su torso una chaqueta.
―Pobrecito. ¿Te has
perdido? Debes tener mucho frío.
El niño dejó de llorar y la miró. No dijo palabra alguna. Ella le alargó
la mano, y el niño la agarró.
―Vente conmigo; en cuanto
realice una tarea, te llevaré a casa. Allá podrás calentarte y comer alguna
cosa.
Antoñita echó a caminar de nuevo por la senda, con el niño de la mano. Ya
fantaseaba incluso con haber hecho un nuevo amigo. Entre tanto pensamiento,
llegaron a la fuente. Antoñita sacó de la cesta la sábana, y empezó a darle «chap… chap… chap…» hasta que quedó… un poco
decente. Odiaba reconocerlo, pero hacía un frío casi sobrenatural, y el viento
silbando entre la neblina no ayudaba a relajarse. Guardó otra vez la sábana en
la cesta, y se dirigió hacia el niño, que todavía tenía la mirada triste.
―Vamos, amiguito. Volvemos
a casa, allá podrás comer y dormir caliente.
El niño levantó la cabeza y sonrió a la muchacha; tenía los dientes más
blancos y bonitos que había visto nunca.
―¡Que dientes más bonitos
tienes!―Dijo
Antoñita
―Eso no es nada―Respondió el niño ―¡Mira mis colmillos!
Y, tras decir eso, se abalanzó sobre el cuello de la pobre Antoñita.
De aquella joven no se supo nunca más, sus padres estuvieron toda la vida
buscándola en vano, aunque en el pueblo hay quién dice que sigue en cierta
manera por allá cerca. En fin, queridos lectores. Que si vais a Penàguila, no
dejéis de admirar la senda de los olmos y su fuente de veinticuatro caños, eso
sí, de día. Porque de noche, os podríais encontrar con una vieja escuálida y de
piel muy blanca, que lava y lava sin parar, furiosamente. Y si no me hacéis
caso, y finalmente es así, no le contéis nunca la historia que os he contado
yo. Porque, de lo contrario, os mirará fijamente y os dirá
―¿¿¿ERAN COLMILLOS COMO
ESTOS???
FIN.
Este relato corto es una versión un poco libre de una famosa «rondalla» popular en el pueblo de
Penàguila, que sí que existe en realidad. La primera vez la leí en la versión y
recopilación de Enric Valor; tal vez no sucedió en la noche de todos los
santos, pero bien podría ser posible, porque en esas fechas puede pasar
cualquier cosa.
-FranXapa
***
Para mear, y no echar gota, ¿verdad? yo, la verdad, no me acercaría demasiado por los Olmos de Penàguila, Alicante.
¿Qué os ha parecido el relato de ésta primera parada?
Pues, conozcamos mejor las obras de el Escritor, conocido en sus redes como Fran Xapa, debido a un error administrativo a la hora de crear su dirección de e-mail.
PROYECTO AVIAR
En la actualidad, está casi acabada la saga de 'Proyecto Aviar', la cual, la primera entrega, podéis leerla AQUÍ, ya que realicé una reseña y tengo que decir, que está muy bien conseguida. El #booktrailer, lo hice yo, además de la reseña, valga la redundancia.
Si quieres adquirir ésta saga, te la dejo POR AQUÍ
PSICOFONÍAS
Psicofonías, "Empecé a escribir de muy joven, cuando pensé que debía ser muy fácil emular a los autores que idolatraba (Gianni Rodari, Richmal Crompton, Michael Ende?) Craso error, escribir no es nada fácil. Sin embargo, a base de leer y formarme, conseguí ganar mi primer accésit cuando estudiaba secundaria, y el segundo en la universidad. Después de eso me lancé a por mi primera novela, que publiqué el año pasado. Psicofonías es mi primera aventura dentro del mundo de la novela de fantasía, un género que siempre me ha atraído, como lector y como autor; aunque eso sí, aderezada con toques de comedia."
Bravo, Keren. No dejes nunca de escribir.
ResponderEliminar¡Hola, en todo caso a los escritores que se han animado a participar! Agradezco enormemente tu paso por mi blog. Saludos!!!
EliminarHola Karem, lo de los colmillos da miedo solo de pensarlo. La novela de Frank, Psicofonías, he oído hablar de ella y tomo nota. Buen texto. No sé si me atreveré a ir a Penàguila. Soy de Castellón, a ver si recuerdo algo y te lo envío. Un abrazo a ambos
ResponderEliminarHola, Nuria! Como todos los lugares, es mejor visitar de día, da yuyu. A mi me lo ha dado. Estoy a la atención de lo que puedas decirme. Fran escribe muy bien, la saga de Proyecto Aviar estoy como loca por averiguar el final. jeje! Ah! Mi nombre es Keren, pero imagino que el móvil te ha jugado una mala pasada. Gracias por pasarte por aquí. Un saludo y un abrazo!!!
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