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Desde la ventana de mi casa, puedo ver cómo el sol impregna la sala para llegar a rociar mi cuerpo y mi estancia haciéndome sentir plena. Descubro olores: La mandarina, cómo buen cítrico, me hace recordar aquellos años de la niñez en que cada desayuno, la acompañaba con unas galletas y unas onzas de chocolate. La fruta no podía faltar. Hecho indiscutible que se mezclaba con el olor dulzón del chocolate negro y sus “galletas María”.
Desde mi ventana puedo ver la calle, que ahora, respira calma y puedo mirar más detenidamente la porción de calle que me ha rodeado todos estos meses. Encuentro unos edificios justo en frente con piscina y aunque ahora no es momento de pensar en bañarse, todas las mañanas puedo ver cómo el vecino hace sus ejercicios y se contorsiona cómo si fuera de plastilina. He dedicado unos minutos a mirar la calle, para ver a qué huele por las mañanas, y la humedad de las mañanas me recuerda a mi adolescencia: Madrugones, rocío en las plantas más próximas, y las cuestas que con la mochila cargada de libros subíamos sin rechistar. Ahora pienso que me quejo por gusto. Pero el ser humano, ha ido guardando las asperezas para hacer uso de su naturaleza más humana: Aprender por las malas.
Aunque dedico las mañanas a recoger la ropa tendida, mantener la cocina limpia y mi habitáculo ordenado, no puedo evitar poner música, mirar el móvil, e ir de vez en cuando al fumadero para exhalar ese vicio que ahora parece estar más dentro de mi.
Aunque no me gusta, dedico más horas a fumar menos. Tengo ilusión por fumar menos, ya que el otro día fume tanto que, mis pulmones se resintieron. El caso es que estaba tan nerviosa por el confinamiento que olvidé que podía salir a comprar lo justo y así poder airearme. Ahora, mis ánimos están más ensalzados. Mis ganas arriba y mis pulmones tienen una tregua.
Me dije que todos los días iría leyendo ese libro que me compré y lo voy logrando. He de reconocer que leo lento pero ya llevo unos cuantos libros encima de la mesita y me inspira a crear estanterías de nuevo para la habitación que me vio crecer un día, ahora redecorada al gusto de mi hermano pequeño. ¿Quizás una mano de pintura? ¿o unos muebles nuevos? Creo firmemente que la ilusión puede dar esperanza. Pero de esa que te hace bien, de esa que hace que cuando lo pienses se ilumine tu alma. Así cómo lo hace el sol cuando rocía el comedor. Es una sensación tan agradable para mi... los días de sol son la esperanza de que algo bueno puede ocurrir, el ánimo está a nuestro favor y las lecturas cerca de la ventana parece que son más amenas.
Vuelvo a divisar las calles desde mi ventana y logro ver cómo una vecina saca a su perro con mucho cuidado, limpiando todo lo que va dejando su compañero. Echo de menos tanto a Anko... Lo último que sé es que está con otra familia. Y eso me alivia muchísimo. Porque al menos, tendrá la vida que ni yo ni mi ex pareja le pudimos dar. Y sollozo al tiempo que sonrío echándole tanto de menos... Que me gustaría volar a Almería y volver a abrazar a mi perro.
Hoy, he escuchado que los vecinos ponen sus canciones por las mañanas y armonizan mis mañanas, levantan mi estado, y a veces, veo cómo la vecina asoma la cabeza por su ventana. Al principio me sentía incomoda, ahora solamente creo que quizás estamos en el mismo punto sin estarlo. Todos pasamos algo, todos sentimos algo, pero son precisamante esos sentimientos los que nos unen.
No puedo hacer nada por volver a ver a mi peludo, pero los días de sol, me recuerdan que fue feliz en la medida que yo pude. En algún lugar, espero, esté bien.
[ Días posteriores]
Hoy el día es gris, y mi ansiedad me obliga a no decaer, mi soledad me insta a relacionarme con los míos mediante lo electrónico. Y aunque no lo he previsto, el sol ha vuelto a salir, y he vuelto a recordar cuando bailábamos el y yo, mi Anko, y daba vueltas sobre sí para jugar conmigo. Sí, será feliz, es feliz, y espero que le den todo lo bueno.
Mientras tanto, hemos reído y hemos llorado de risa con los vídeos de estos días. La calle tiene un olor raro, ¿Será a limpio? no consigo reconocer ese olor. Pero lo que se es que las gentes acuden a los establecimientos y vuelven a sus casas otros se dan un paseo y para que esto funcione, tenemos estar todos en su casa. Y entiendo que no es fácil estar todo el día metido en casa, sobre todo si tu piso es minimalísta y no tienes ni ventana al exterior. Pero hay que hacer un esfuerzo que será breve si todos ponemos de nuestra parte.
Hoy no me siento esperanzada, la gente campa a sus anchas por las calles y han decidido endurecer las normas a los ciudadanos. Algo que hay que hacer para poder salir de esta, ¿no?
Espero que, ahora que están siendo más duros, todos tomemos conciencia pero miro mi habitación y me doy cuenta de que, no todos podemos soportar lo mismo. Sin embargo, con esfuerzo, se han logrado milagros. En Italia el agua vuelve a estar más limpia, hay menos contaminación, el aire está un poco más limpio y el planeta volverá tener un poco más de albeólas, el pulmón de la humanidad.
El próximo día comenzamos con las historias variadas de siempre...
GRACIAS POR LEER,
GRACIAS POR DARME CORDURA...
©️El Rincón de Keren
¡Di que si! Para todos esta siendo duro quedarse en casa pero es lo que tenemos que hacer en los tiempos que corren,si todos ponemos de nuestra parte antes volveremos a la normalidad ... Buen post y mucho animo para estos largos días ^^
ResponderEliminarHola, Unaa Chica del montón!!
EliminarEs primordial concienciarse de que hay que quedarse en casa, es más probable que todo termine antes. Y claro que a veces, tendremos bajones pero nuestra mente es capaz de adaptaarse a las adversidades. El problema es que nos estancamos en lo malo, a mi me ocurre, y no hay que llegar a ese punto, la normalidad llegará pasando por lo malo.
Exacto, si todos ponemos de nuestra parte, antes volveremos a nuestros días.
Espero que estéis bien todos en tu familia y a por todas que se puede lograr.
¡¡Mucho ánimo para estos días!!
Gracias por pasar por mi humilde blog.
Gracias a ti ^^
EliminarBesos para todos :)
No son fáciles estos días, pero con buenas lecturas el confinamiento puede ser más leve, saludos y a cuidarse!!!
ResponderEliminarHola Eli,
EliminarPor eso tenemos un frente común, apoyarnos y darnos el calor electrónico posible. Ahora más que nunca tenemos que poner de nuestra parte para que esto acabe pronto.
No es fácil, hay gente que se estresa o que tiene alguna patología pero por eso es primordial, mantenerse activo, en la medida de lo que sea posible.
Para que sea leve.
Gracias por pasarte, Eli.
Un saludo hay que cuidarse mucho.
Hola, Keren. Para mi estos días son duros, ya no solo por el encerramiento también por todas las preguntas que esto me está planteando y los miedos y nervios que surgen. En fin, la semana pasada apenas pude leer pero ya estoy más relajada.
ResponderEliminarBesos. Un placer leerte.
Hola Carmen,
Eliminarentiendo lo que me cuentas porque yo he vivido eso en estos inicios. No es fácil, pero permítete gritar, llorar, pensar, reflexionar, escribir lo que estás sintiendo. Espero que sigas relajada. Y que pienses en lo bueno de estos días aunque solo sea para estar a gusto en este tiempo contigo misma en casa. Ya luego, ya pensaremos. Puedes hablar conmigo cuando quieras. Ánimo, y mucha fuerza.
Gracias por pasar y animarte a dejar tus pensamientos y emociones. ¡Fuerza!
¡Hola, Keren!
ResponderEliminarMe ha sorprendido para bien la cadencia y la tranquilidad que se respira en tus texto. Y lo que es más complejo para todo escritor; lo has conseguido transmitir muy bien. En medio del pánico de algunos, leerte me reconfortado y dado tranquilidad. Lo peor, está por llegar. Los días de confinamiento comienzan a pesar y veremos como aguantamos toda la situación sin momentos de derrumbe psicológico.
Me acuerdo de Anko. Y creo que la medida de poder sacar a pasear a las mascotas es muy acertada. También el mantener las clínicas veterinarias abiertas. Solo faltaba que abandonáramos a nuestras mascotas con lo que ellas nos han dado.
Un abrazo y cuídate mucho.
Hola Miguel,
EliminarNo sabes cómo me alegra que te haya reconfortado. Sí, hay muchos días por delante, pero creo que el error es pensar en lo que vendrá. Yo sé cómo me siento ahora. Me cuesta verme en este ahora, pues hago todo por este día. Me doy autocuidados. Las vidas se estresan pero abordar lo que nos viene para darnos cuenta que aun seguimos aquí y que no todo lo que nos rodea es malo, cómo el amor de nuestras mascotas, ¡Cuantas alegrías nos dan! creo que sí, es dificil, no entrar en pánico teniendo en cuenta que, nos ha venido casi de sopetón por no hacer caso, a las advertencias de China pero estamos aquí, los que estamos, y aprender de los que se fueron para crear ese amor solido para nosotros mismos. A veces, nos llenamos de muchas tareas pero a lo mejor el no hacer nada durante dos días nos da ese oxígeno que necesitamos, llevando nuestra mente, a lo que hemos logrado lo que tenemos, lo que queremos conseguir y lo que nos gustaría de nosotros mismos, olvidando soberbia en cosas, sino más bien para nuestro bienestar.
Te confieso que he tenido mi estado de crisis por no poder salir pero creo que todos los estados son válidos. Si hay que gritar ¿Por qué no lo vamos hacer? es una situación tensa de la que tenemos que hacer algo para destensar, o simplemente, dejarnos llevar por lo bueno después de ese grito. Me recomendaban meditación pero yo prefiero leer me relaja más. Además tiene la doble función de que además aprendo y reflexiono, bueno son más jeje! pero todo suma. Hay que recogerse en lo que somos ahora y lo que podemos hacernos en ese día
¿Cómo estas ahora? ¿Me siento bien? ¿Cómo hacer para sentirme mejor? ¿Es realmente esto lo que me hace sentir mal?
Estaba preocupada por si estabas mal.
Celebro que estés bien.
Gracias por pasarte. Un super abrazo y a cuidarse mucho.