¡Hola, mis seguidores; lectores habituales y nuevos lectores! Quiero abrazarte, acariciarte el cabello con cafuné. Desde que estuve en Inglaterra, enviado por mis padres a regañadientes, no he dejado de pensar en ti: de pensar en tu olor, en tu cara, tus labios, tus ojos, tu cuerpo redondo y perfecto. Esa risa que me hace que me hace enloquecer … daría lo que fuera por oír una vez más tu risa, tus ocurrencias, tu manera de apaciguar mi carácter tan hiperactivo. ¿Sabes? Nunca fui romántico, nunca fui la persona más amorosa por así decirlo, ni la más amigable. Y ahora me doy cuenta que mi carácter era un tanto huraño; me apartaba de la gente y no quería saber nada del mundo exterior, pero fue ese día, en el que mientras yo leía un libro te acercaste a mi, y me dijiste “Buen libro. Pero tendrás que leer otros libros a parte de este, si quieres al menos una amiga” nunca supe lo que quisiste decir con aquellas palabras mientras leía el Manual de magia negra . Vivía absorto en mi mundo y
ENTRE TANTO RUIDO EN EL CUERPO, ME LETRO CON LITERATURA: RELATOS, MICRORRELATOS, POESÍA , Y MUCHO MÁS ¡DESCÚBREME!